Owen, de doce años, es brutalmente intimidado por sus compañeros de clase y descuidado por sus padres divorciados. Lamentablemente solo, Owen pasa sus días planeando vengarse de sus atormentadores de la escuela media y sus tardes espiando a los otros habitantes de su complejo de apartamentos. Su único amigo es su nuevo vecino, Abby, una joven misteriosamente auto-poseída que vive al lado con su silencioso padre. Un niño frágil y con problemas de la edad de Owens. Reconociendo a un compañero marginado, Owen se abre a ella y, en poco tiempo, ambos forman un vínculo único. Cuando el padre de Abby desaparece, la niña aterrorizada tiene que valerse por sí misma. Aún así, ella rechaza los esfuerzos de Owen para ayudarla, lo que lleva al imaginativo Owen a sospechar que está escondiendo un secreto impensable.
